¿Cómo lubricar la transmisión de la MTB?
Las escapadas con nuestra MTB donde el agua y el barro son protagonistas se disfrutan, un sendero embarrado con nuestra bicicleta, y mas aún la ducha en casa, ¿pero la transmisión que dice sobre ello? ¿También disfruta?
Desde Ridefyl queríamos compartir algunos consejos a seguir, durante todo el año para que nuestra transmisión no sufra y disfrutemos del barro, el agua y la nieve.
Como es lógico se trata de cuidar la cadena y demás componentes de la transmisión en cada salida, pero en este post queremos empezar desde el principio, desde que te dispones a lavar tu bicicleta hasta que vuelves a cogerla de nuevo.
Antes de lavarla.
Y es que somos muchos los que acabamos por ir al lavadero, y eso puede estar muy bien para limpiar el cuadro (siempre y cuando evitemos en la medida de lo posible el agua a presión en puntos claves) si queremos que nuestra transmisión quede perfecta debemos echarle desengrasante, ya que el agua por si sola puede no ser suficiente para eliminar los restos de cera/aceite de la cadena, aunque tenemos una buena noticia, ya que hemos conseguido que nuestra cera no requiera de un desengrasado como ocurre con otros tipos de lubricantes, además evita que la suciedad se nos quede en la cadena, con lo que no tendremos cadenas oscurecidas por acumulación de dicha suciedad y al ser biodegradable ayuda al medio ambiente y no contamina el entorno.
Después de lavarla.
Lo ideal es secar la bici con un trapo para que quede completamente limpia y brillante, así como las llantas y demás componentes. Os aconsejamos que también volváis a repasar la cadena con el trapo, para así eliminar en la totalidad la cera/aceite que pueda haber quedado, es necesario eliminar los restos anteriores antes de lubricar la cadena. Tendremos que asegurarnos de que nuestra cadena está seca, ya que si no es así corremos el riesgo de que se oxide, con lo que acortará la vida útil de la transmisión.
La cadena debe estar siempre limpia y lubricada.
Antes de volver a usarla.
Si la vamos a utilizar al día siguiente tendremos que lubricarla una vez que la dejemos en casa. Personalmente os recomendamos cera, es más limpia que los aceites, por lo que no ensuciará tanto nuestra cadena, y por ende los piñones y platos, haciendo de esa forma que el cambio entre piñones sea más suave durante más tiempo, alargando la durabilidad de nuestra transmisión. Por otro lado con la cera Ridefyl no es necesario echar mucha cantidad, por lo que a parte de alargar la vida de nuestra cadena, también ahorraremos en lubricante.
Si la dejaremos parada unos días aconsejamos hacer lo mencionado anteriormente el día que vayamos a cogerla, sobretodo si no sabemos cuanto tiempo estaremos sin montar en bici. Esto recomendamos hacerlo así para que el lubricante esté "fresco" cuando empecemos a rodar y se integre bien entre piñones y platos, cosa que no pasaría si dejamos la bici parada, ya que la cadena no estaría en movimiento por lo que no pasaría por el cassette ni platos. Aunque si que recomendamos echar una mínima capa de cera para que nuestra cadena quede protegida.
Con esta serie de pautas nos podemos olvidar de la transmisión durante nuestras salidas en bici y disfrutar al 100% de cada pedalada, sin importar el barro que haya o lo mucho que pueda llover.
¿Tenéis algún consejo para cuidar la bici? ¡Déjanos un comentario para compartirlo!
"Ride For Your Life"
Para limpiar la cadena, la desmonto de la bici(tengo eslabon de cierre rapido) la meto en un producto de limpieza que tengo en el taller, la limpio bien, y la seco con trapo y pistola de aire. Me paso el trapo por los platos, cambios, piniones, incluso los limpio con un pincel con el mismo producto. Despues de voler a montar la cadena, l engraso con aceite de teflon;una gota a cada eslabon, mas todo lo que pueda llegar a las articulaciones de los cambios. Me pon a muver los pedales en parado al revés, despues paso el trapo para quitar el aceite sobrante. Saludos!